días clonados
Suena el reloj, y en ese limbo entre que sigo durmiendo y me despierto, estiro la mano, tanteo y logro acertar un golpe seco en el off. me levanto. camino hacia el closet. saco un terno, una camisa y una corbata que combinen. bajo la escala y camino hacia el baño como zombie. saco la toalla, prendo el agua, me ducho, me seco, me visto y me dirijo a la cocina. tomo el diario y lo leo siemrpe en el mismo orden. economía, A, cuerpo C, deportes y suplementos. saco un yoghurt, pongo el tostador, sale olor a quemado, unto la mantequilla y tomo un vaso de agua. vuelvo a subir, me lavo los dientes y me pongo la chaqueta. guardo el celular, unos billetes, algunas monedas y las llaves. camino hacia la puerta, tomo el libro de turno, chequeo los papeles y salgo. tomo el taxi que se estaciona en la esquina de mi casa en dirección al metro. son setecientos pesos. pago con los mil que tengo en el bolsillo y ocupo el vuelto para comprar el boleto, sobrando simepre una moneda de a diez. camino hacia el primer carro, que normalmente lleva asientos disponibles, y me pongo a leer para no tener que mirar a la cara a los demás. me bajo y la estación da justo en la puerta de mi trabajo. saludo al portero, a la secretaria y reviso los mensajes. subo a mi oficina, chequeo la agenda y preparo el día. entro a una reunión y salgo de otra. atiendo a algún alumno y otro grupo hace fila afuera por su turno. un profesor viene atrasado y otro me avisa que no puede venir. en cualquier espacio de tiempo, voy al casino y pido lo de siempre: un sandwich de pollo con mayonesa y una coca cola light. llega la tarde, camino hacia la sala y dicto mi clase. hay alumnos atentos, otros aburridos, algunos que hacen preguntas y los clásicos que conversan y así hasta que suena el timbre. llega la noche. cierro la oficina y bajo. me despido de la gente de aseo, del guardia y salgo. bajo al metro nuevamente. vuelvo a caminar hacia el carro del conductor. recorro medio santiago bajo tierra. espero que pase la micro, fatigado y muerto de hambre. la máquina va llena y avanza lento. quedan dos cuadras y comienzo a abrirme paso a punta de codazos por el atestado pasillo. toco el timbre y bajo. camino la cuadra arrastrando los pies. saco la llave y abro el portón. entro en la casa y escucho un solo de laúd que no reconozco, pero que me asegura que ella llegó antes que yo. la observo a lo lejos y sonríe. guardo la imagen y sonrío también. nos miramos directo a lso ojos. nos damos un beso y un abrazo en silencio. la música se vuelve difusa, los colores se diluyen y el tiempo se detiene. se detiene justo en ese momento, ese preciso instante, en que todos los días clonados adquieren sentido.
Suena el reloj, y en ese limbo entre que sigo durmiendo y me despierto, estiro la mano, tanteo y logro acertar un golpe seco en el off. me levanto. camino hacia el closet. saco un terno, una camisa y una corbata que combinen. bajo la escala y camino hacia el baño como zombie. saco la toalla, prendo el agua, me ducho, me seco, me visto y me dirijo a la cocina. tomo el diario y lo leo siemrpe en el mismo orden. economía, A, cuerpo C, deportes y suplementos. saco un yoghurt, pongo el tostador, sale olor a quemado, unto la mantequilla y tomo un vaso de agua. vuelvo a subir, me lavo los dientes y me pongo la chaqueta. guardo el celular, unos billetes, algunas monedas y las llaves. camino hacia la puerta, tomo el libro de turno, chequeo los papeles y salgo. tomo el taxi que se estaciona en la esquina de mi casa en dirección al metro. son setecientos pesos. pago con los mil que tengo en el bolsillo y ocupo el vuelto para comprar el boleto, sobrando simepre una moneda de a diez. camino hacia el primer carro, que normalmente lleva asientos disponibles, y me pongo a leer para no tener que mirar a la cara a los demás. me bajo y la estación da justo en la puerta de mi trabajo. saludo al portero, a la secretaria y reviso los mensajes. subo a mi oficina, chequeo la agenda y preparo el día. entro a una reunión y salgo de otra. atiendo a algún alumno y otro grupo hace fila afuera por su turno. un profesor viene atrasado y otro me avisa que no puede venir. en cualquier espacio de tiempo, voy al casino y pido lo de siempre: un sandwich de pollo con mayonesa y una coca cola light. llega la tarde, camino hacia la sala y dicto mi clase. hay alumnos atentos, otros aburridos, algunos que hacen preguntas y los clásicos que conversan y así hasta que suena el timbre. llega la noche. cierro la oficina y bajo. me despido de la gente de aseo, del guardia y salgo. bajo al metro nuevamente. vuelvo a caminar hacia el carro del conductor. recorro medio santiago bajo tierra. espero que pase la micro, fatigado y muerto de hambre. la máquina va llena y avanza lento. quedan dos cuadras y comienzo a abrirme paso a punta de codazos por el atestado pasillo. toco el timbre y bajo. camino la cuadra arrastrando los pies. saco la llave y abro el portón. entro en la casa y escucho un solo de laúd que no reconozco, pero que me asegura que ella llegó antes que yo. la observo a lo lejos y sonríe. guardo la imagen y sonrío también. nos miramos directo a lso ojos. nos damos un beso y un abrazo en silencio. la música se vuelve difusa, los colores se diluyen y el tiempo se detiene. se detiene justo en ese momento, ese preciso instante, en que todos los días clonados adquieren sentido.
mucho rato sin escribir hace que la mente de action datsun piense en otras cosas. algunas son buenas cosas, otras mejor dejarlas para el olvido. mejor dejo la filosofía barata para otro día y explico lo que ha pasado en todo este rato.
después de año nuevo sucede lo de siempre, uno comienza a pensar en como lo hizo el año que pasó y como se proyecta para el 2006. o sea, no cometer los mismos errore, mejorar lo que se pueda, sobre todo, hacer mejor las cosas.
en el intermedio a mi viejo lo mandaron a scl, por lo que ahora tengo otras preocupaciones. con mi novia cumplimos un año y cuatro meses juntos, con viaje a la playa incluído.
si preguntan, la respuesta es no, aún no tengo un ipod y menos un ibook, por lo que si quieren hacerme un regalo a saben.
después de año nuevo sucede lo de siempre, uno comienza a pensar en como lo hizo el año que pasó y como se proyecta para el 2006. o sea, no cometer los mismos errore, mejorar lo que se pueda, sobre todo, hacer mejor las cosas.
en el intermedio a mi viejo lo mandaron a scl, por lo que ahora tengo otras preocupaciones. con mi novia cumplimos un año y cuatro meses juntos, con viaje a la playa incluído.
si preguntan, la respuesta es no, aún no tengo un ipod y menos un ibook, por lo que si quieren hacerme un regalo a saben.
para que no se aburran con mi blog, abajo del reloj que se encuentra a su derecha les dejé un sudoku. un qué? un sudoku. si no sabe que es eso o no sabe como jugar, haga click acá.
i want my ipod!!!no para seguir modas, no por que, de una u otra forma, el ipod entrega un status de "ciudadano gadget" ni mucho menos para andar mostrandolo por todas partes. simplemente por que desde que salió el primero que quiero uno. por eso comienzo la campaña "mi primer ipod... pero ahora!"
UPDATE: la campaña comenzó y ya existe un primer logo. quienes deseen sumarse de cualquier forma a la campaña son bienvenidos.
UPDATE: la campaña comenzó y ya existe un primer logo. quienes deseen sumarse de cualquier forma a la campaña son bienvenidos.
ok. hace mucho tiempo qu no escribía en el blog, pero no he tenido internet para hacerlo. han pasado muchas cosas en este rato que llevo sin escribir. he pensado en muchas cosas que puedo hacer, pero necesito algunos aditivos técnicos para lograrlo. por ahora todo está en stand-by.
¿qué es lo que jala a un hombre en múltiples direcciones, pero al mismo tiempo lo mantiene unido?
¿es amor? ¿odio? ¿arrepentimiento?
¿qué es lo que transforma a un ángel en demonio?
¿o atrae el uno a otro?
¿qué es lo que jala a un hombre en múltiples direcciones, pero al mismo tiempo lo mantiene unido?
es su alma.
y ya sea buena o mala o una combinación de ambas, el hombre no puede escapar a los impulsos de su alma.
¿es amor? ¿odio? ¿arrepentimiento?
¿qué es lo que transforma a un ángel en demonio?
¿o atrae el uno a otro?
¿qué es lo que jala a un hombre en múltiples direcciones, pero al mismo tiempo lo mantiene unido?
es su alma.
y ya sea buena o mala o una combinación de ambas, el hombre no puede escapar a los impulsos de su alma.
